Luciano Palacios a favor del deporte y de la generación de valores

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Además de amar los deportes, es un Químico Farmacéutico Biólogo quien siempre ha ejercido la investigación botánica industrial. A su vez, ha administrado empresas por más de 15 años. Tiene amplios conocimientos en el tema de emprendimiento y está actualmente sumergido en los negocios digitales.

El deporte llegó a la vida de nuestro invitado especial, Luciano Palacios, de forma muy interesante. Cuando tenía 5 años, era un infante lleno de energías y por eso su madre decidió meterlo a jugar beisball.

Este deporte le encantó pero al final de un ciclo, sufrió una gran decepción: Para una selección nacional de juegos infantiles, el entrenador puso a jugar a niños hijos de padres que tenían posiciones importantes en la federación. A Luciano esto le pareció inaceptable, por lo que decidió irse.

Tomó una decisión con determinación: “A partir de ahí, me empecé a meter en todos los deportes de la faz de la tierra, porque quería demostrar que no necesitas entrar por cuello” relata. Quiso demostrar que la disciplina, las condiciones físicas y el talento deportivo debían prevalecer sobre otras circunstancias.

Estuvo en más de 15 federaciones.

Practicó bádminton, balonmano, escalada y rugby, entre otros deportes.

El invitado comenta porqué estos deportes son importantes para la sociedad. Afirma que la escalada, por ejemplo, explota no sólo habilidades físicas, sino también habilidades mentales. Es una actividad desafiante. Por otro lado, profundiza mucho en la filosofía detrás del rugby. “Es un deporte súper violento, pero en el que menos lesiones hay” explica, “¿Por qué? No competís contra tu adversario, sino que competís con él. Esa es la diferencia”.

“El deporte es necesario más que cualquier otra cosa de entretenimiento, porque une estratos sociales y fortalece valores” opina Luciano Palacios.

En un equipo deportivo, no importa que un miembro sea multimillonario y que el otro sea pobre. En ese momento, luchan por el mismo objetivo. “Se rompen ese tipo de fronteras y se inculca uno de los valores más importantes: El respeto a las personas”, asegura el invitado.

En El Salvador, se sabe que hay inseguridad y que hay mucha delincuenciaCon base en esto, Luciano también recalca la importancia de forjar una generación de individuos fuertes, tenaces, disciplinados, y con valores.

Los deportistas como individuos pueden servir como inspiración a los niños.

Esto es algo que incluso era priorizado en las civilizaciones antiguas. Nuestro invitado cree firmemente en que este ideal puede ser retomado a nivel nacional para el beneficio colectivo.

“Se pueden hacer mil cosas con el deporte” comenta Luciano. “Primero: Se puede hacer la generación de empleo a través del deporte. Dos: Los ministerios, en vez de estar buscando de dónde traer personas con valores, deberían contratar deportistas, personas de arte y cultura. Son personas que ya tienen una disciplina, que manejan su vida de forma coordinada”.

En la sociedad salvadoreña, los deportistas son muy subestimados. Y se trata de un trabajo físico serio porque consumen en su entrenamiento muchas horas al día. “No sólo genera cultura” opina el invitado, “Genera buenas personas y es un eje económico, pero no se ha inculcado. Nadie le ha puesto el interés adecuado”.

Es aquí donde entra la política en la vida de Luciano.

Algo curioso del caso es que a él nunca le había interesado este rubro, pero se dio cuenta de que era la única forma en la que su voz podía ser escuchada. Por eso decidió participar en elecciones internas del PDC (Partido Demócrata Cristiano) y su estructura lo eligió como tal. Ahora es candidato a diputado por el departamento de San Salvador.

Se pueden hacer muchos movimientos, pero si las personas están dentro de la asamblea legislativa, estos movimientos adquieren gran fortaleza y pueden generar cambios reales y, sobre todo, verdaderas oportunidades.

La siguiente pregunta es:

¿Por qué PDC?

Luciano opina que el problema de los dos partidos principales es que en la actualidad no son ni la sombra de sus propios ideales. Y él no se quería meter en ninguna disputa. “Yo quiero trabajar por lo que yo quiero; lo que me motiva” aclara y tomó la decisión, seleccionando el partido mencionado.

“Me identifico por el tema demócrata y cristiano” puntualiza. Explica que el PDC está en un momento adecuado, ya que está teniendo aperturas ideológicas. Es de esta forma en la cual Luciano decidió participar en la política: Porque las circunstancias eran las indicadas y porque tenía, y tiene ideales por los cuales luchar en relación a la cultura, al deporte y a la sociedad.

¿Qué otros ejes existen además del deporte?

Luciano se guía por el fomento de valores. Uno de sus otros ejes gira en torno a la Química, la Farmacia y la Biología, ya que es su profesión. Le fascinó el tema de la investigación botánica y por eso propone fomentar el agro con la investigación y desarrollo en cultivos no tradicionales.

En El Salvador, las cosechas parecen limitarse al maíz, a los frijoles, a la caña y al café. No hay una educación que motive a los agricultores a tener cultivos no tradicionales. El invitado opina que la cultura necesita avanzar y por eso quiere impulsar un instituto de investigación botánica de interés económico para el país.

Comenta que el revitalizar los cultivos es algo que puede mover la economía hacia un camino fructífero. Algo que desea fomentar en específico es el cultivo de bambú, por varias razones: Su cultivo en la cuenca de los ríos evitará la erosión y ayudará al cambio climático. También puede haber un programa para construir casas. En Tailandia, por ejemplo, no existen las champas. La vivienda mínima no es indigna, sino que estas casas están hechas de bambús.

Otro eje fundamental va dirigido al fortalecimiento del emprendimiento.

Hay estadísticas que dicen que el 90% de las empresas en el país son familiares. Luciano comenta que este tipo de negocios debe ser fortalecido. Llega un momento en el que los hijos de la tercera generación ya no quieren hacer nada. Como ya tienen mucho dinero, se pierde la orientación hacia la empresa familiar y esto daña la economía. Reduce las fuentes de trabajo adecuadas.

Él propone la creación de un programa dedicado a ayudar a las empresas familiares. Sugiere que se les debería dar una mejor tasa de impuestos, y que esta cantidad diferenciada vaya dirigida a la capacitación del personal para que exista un sentido de visión empresarial bien solidificado.

Si un heredero no se interesa por el negocio familiar, la empresa debe seguir. Luciano explica que esto no significa que el Estado se apropie de la marca. Es por eso que se hace un plan de incentivo para los trabajadores; para que la empresa siempre posea la gestión de calidad requerida.

En la empresa familiar, debería existir un deseo esencial de superación colectiva: Que todos juntos crezcan. “En épocas de prosperidad, se pueden compartir las ganancias, pero en épocas de crisis, se tienen que repartir las responsabilidades” comenta Luciano.

Las empresas familiares logran la autosostenibilidad del país.

Aquí entra la propuesta que ofrece Luciano sobre el tema de los salvadoreños que pronto regresaran a sus tierras. El invitado comenta que lo ideal es que estas personas inviertan en su país y pongan su propio negocio, o inviertan en negocios familiares. La inversión es algo que hace falta y muchos de ellos tienen el capital para hacerlo.

La inversión no sólo debe ir guiada hacia el crecimiento económico, sino también, abarcar la inversión del conocimiento para fortalecer el negocio.

En el caso de los salvadoreños que no tienen capital, el invitado propone la creación de un centro de formación que los guíe sobre el funcionamiento del país: Cómo abrir cuentas de ahorro, por ejemplo.

Luciano Palacios le aconseja a tanto a los emprendedores como a los deportistas lo siguiente: “Aprovechen las oportunidades”. Dice que si estas no están, entonces las puedes fabricar. Resalta bastante la importancia de estar informado; de leer e instruirse.

“Conforme vayas haciendo las cosas bien y vayas fortaleciendo tu vida en diferentes aspectos, las oportunidades se te van abriendo. Se te van dando. Lo importante es estar preparado para la oportunidad. Ahora los jóvenes tenemos que construir nuestra sociedad. Tenemos el deber de soñar con esperanza y situarnos en la responsabilidad de poder hacer cambios verdaderos, porque somos jóvenes en trasformación día con día”. Concluye el invitado.

Te invitamos a seguir la página de Facebook de Luciano Palacios.