Big data: La información que nosotros generamos

Big datas: La información que nosotros generamos

¿Has escuchado hablar del big data? Es posible que no, o tal vez creas que es un término exclusivo de la informática al cual no debas prestarle atención. En la dinámica del mundo actual, caracterizado por mantenerse siempre conectado, muchas veces pasamos por alto qué información compartimos en redes sociales, sitios web, buscadores o correos electrónicos. Sobre todo, ignoramos qué hacen las empresas con nuestros datos.

Te invitan a conocer un restaurante al cual nunca has ido antes; vas entre amigos y pasas un momento agradable. Experimentas una reunión social inocente.

A partir de ella, pueden generarse diversos escenarios:

1) Un amigo toma una foto, la sube a alguna red social y te etiqueta.

2) Tú mismo compartes una imagen y quizá hasta compartiste tu ubicación o señalaste el lugar.

3) Pides la clave del wifi, te conectas y realizas una búsqueda en google.

En cualquiera de los tres casos, se generó una información (un dato) y, con certeza, no tardará en aparecer la publicidad de dicho restaurante en tu línea de tiempo de Facebook o Instagram, anunciando la promoción del día.

En otra situación, comienzas a seguir a una persona a través de una red social. No tarda en aparecer entre las sugerencias de alguna otra (sobre todo entre Facebook e Instagram). En otro ejemplo, comienzas a hablar de un tema con una persona. No hay en teoría ninguna conectividad de por medio, pero llegas a casa y escribes en el buscador de tu computadora temas relacionados. Quizá hasta entres a YouTube, y no tardará en aparecer sugerencias de grupos de discusión sobre dicha temática.

La respuesta es simple: Nosotros mismos generamos toda la información necesaria, con nuestros likes, comentarios, personas que agregamos o seguimos, lo que compartimos y en los lugares donde nos etiquetamos. Allá, en el ciberespacio, todo esto se procesa y así se configura la publicidad, las sugerencias, el orden en el que las noticias que nos aparecen; es decir:

Se construye nuestra presencia en la red.

Los big datas es un término que hace referencia a la dinámica actual y avance de la tecnología. Según el portal de noticias Eleconomista.es, se entiende como: “la gestión y análisis de enormes volúmenes de datos que no pueden ser tratados de manera convencional, ya que superan los límites y capacidades de las herramientas de software habitualmente utilizadas para la captura, gestión y procesamiento de datos”. Puedes leer más al respecto acá.

En otras palabras, con el actual uso de dispositivos móviles y una sociedad cada vez más hambrienta por estar en línea, la cantidad de información que se genera es superior a la que pueden almacenar las grandes compañías. Por ello, se ha invertido una infraestructura y programas que permitan almacenar e interpretar todo ese volumen para la toma de decisiones.

En ello radica el origen del término y su uso popular.

Anteriormente, una empresa necesitaba realizar estudios de mercados de forma directa para poder tener acceso a la información de sus consumidores y posibles clientes. En otras palabras, debían acercarse ellos a sus usuarios para comprenderlos y poder plantear estrategias acorde a sus necesidades. Estos métodos, como encuentras,  ya sean grupos focales o entrevistas, llevaban tiempo y poseían su margen de error.

Hoy en día, ya no es necesario buscar al consumidor ya que es él mismo quien le brinda a la empresa todos los datos necesarios, lo cual permite que incluso ya no se hable de un público meta global. Se habla de publicidad dirigida de forma personalizada a grupos específicos.

A esto s e le llama micro target.

Facebook, Instagram y WhatsApp; Google y Youtube, consumen gran parte de nuestra actividad en la red. Ellos lo saben, y ponen a disposición todo ello a las empresas afiliadas que lo requieran, por un módico costo.

Toda nuestra información se encuentra almacenada en una nube o espacio físico de gran capacidad. Gracias a la gestión de los big datas, esta se procesa y permite al interesado conocernos incluso mejor que nosotros mismos. Conoce nuestros gustos, tendencias, pasatiempos, lugares frecuentes que visitamos, red de amigos; y, al menos en teoría, garantizan que nuestra experiencia en redes sociales y sitios web sea acorde a lo que “nosotros deseamos”.

Si te estás preguntado la legalidad de vender nuestra información al mejor postor, es importante recordar que nosotros señalamos cierta casilla que dice: He leído y acepto los términos, por lo tanto, hemos autorizado dicha acción.

Los big datas no son en sí mismo negativos o positivos, como toda tecnología dependerá mucho de cómo se es utilizada. Lo importante es comprender qué tanto estamos compartiendo y si tenemos control de ello, ya que, se alimenta de lo que nosotros mismos generamos.