El primer año de mandato del 45°, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, pasará a la historia por sus continuos intentos de erradicar toda iniciativa que regularice a aquellas personas que han entrado al país sin documentos que avalen su status migratorio. El episodio más reciente de esta campaña contra los inmigrantes de distinto origen tiene como principales actores a los dreamers, quienes son hijos de los millennials que llegaron al país siendo niños.
Esta comunidad tenía hasta hace poco su futuro asegurado en el país hasta cierto punto, pues el programa de Acción Diferida por Llegada de Infantes (DACA, por sus siglas en inglés) les garantizaba status legal, permisos de trabajo y en algunos estados, incluso licencia de conducir. A estas alturas de la situación, es un hecho consumado que dicho programa será cancelado. No obstante durante la semana, el asunto ha tomado un giro que permite asumir cierto optimismo.
El fin de DACA se retrasa por 6 meses.
For all of those (DACA) that are concerned about your status during the 6 month period, you have nothing to worry about – No action!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 7 de septiembre de 2017
El inesperado anuncio fue dado a conocer el pasado 7 de septiembre de un modo muy característico del presidente, es decir, mediante la red social Twitter. Como es su costumbre con decisiones de este calibre; «Para todos aquellos (DACA) que están preocupados sobre su estatus durante el período de seis meses, no tienen nada de qué preocuparse – ¡No habrá acciones!», reza el breve comunicado de Donald Trump en la red social de los 140 caracteres.
Esto acontece tras una reunión privada del presidente Trump con la líder de la bancada demócrata en el Congreso, Nancy Pelosi, quien pidió al mandatario un plazo de 6 meses para encontrar una solución conveniente y consensuada. Una fuente anónima y estrechamente ligada al bando demócrata confirmaría después que el referido tweet es resultado de la reunión privada con la congresista Pelosi.
La incógnita de los próximos 6 meses.
Tras el escueto pero importante acuerdo político, cabe preguntarse qué le espera a los dreamers pasado el plazo concedido para la suspensión de DACA. Precisamente esta es la tarea que a partir de la difusión del mensaje queda para el Congreso, ya que tras concluido el plazo, se suspenderá el programa tal como se había anunciado en un principio.
No será una situación sencilla debido a que este es un tema bastante espinoso en el que es complicado lograr acuerdos. El principal obstáculo estriba en el bando republicano, que ciegamente apoya cualquier iniciativa anti-inmigrante que proceda de la Casa Blanca. A esto se suma que tras la reunión con Pelosi, Donald Trump decidió dejar el tema completamente en manos del Congreso.
Por ello, la necesidad y urgencia de un acuerdo se impone.
“Realmente creo que el Congreso quiere ocuparse de esto”, respondió Donald Trump a diversos medios tras conocerse el anuncio.
Esta situación es un eslabón más de la cadena de contradicciones que se han venido dando en el tema migratorio desde que Donald Trump asumió la presidencia. Si bien en principio trae incertidumbre en un tema crucial para millones de personas, de igual forma se envía el mensaje que no está todo escrito y que una solución es posible mediante negociaciones, aunque el escenario más probable es que la misma sea encontrada en el largo plazo.
