¿Una nueva era para las salas de cine?

¿Una nueva era para las salas de cine?

Disfrutar una película en la comodidad de un cine es una de las formas tradicionales de entretenimiento que a pesar del avance tecnológico, siguen tiendo muchos adeptos alrededor del mundo. Pese a que en muchas ciudades, emblemáticos teatros y salas de exhibición han sido cerrados debido al ascenso de los servicios de streaming, la sala de cine sigue siendo uno de los lugares preferidos para disfrutar de las mejores superproducciones con los actores más famosos.

A menudo es discutido cuánto tiempo le queda a estos locales.

 Han sido parte de la cotidianeidad desde hace 122 años.

Por generaciones, han sido el punto de encuentro de grupos de amigos y parejas que buscan el disfrute de distintas historias y géneros en la gran pantalla. Gracias a nuevos formatos y mayor comodidad en cada recinto, siguen habiendo grandes incentivos para ir asistir a diversas funciones y estrenos, aunque el efecto de la tecnología se deja sentir en la afluencia de público.

Un anuncio reciente introduce una paradoja interesante al presente y futuro del cine, pues con elementos propios del streaming se pretende revitalizar la experiencia de disfrutar nuestros filmes favoritos antes que nadie y en una sala con todas las comodidades.

MoviePass es una atractiva propuesta para los cinéfilos recurrentes.

Este es un servicio de cine por suscripción que inició en el año 2013. Desde su lanzamiento y hasta nuestros días había estado disponible únicamente en las distintas cadenas cinematográficas de los Estados Unidos. Sin embargo, hace poco ha saltado a la palestra mundial dado que una rebaja en sus precios anticipa que este sería el inicio de una nueva era para el cine tradicional.

¿Una nueva era para las salas de cine?

En los últimos 4 años, MoviePass ha sido considerado como un producto para la élite, pues la suscripción tuvo inicialmente un costo relativamente alto. Por US$50.00 al mes, podías ver en cualquier local de las cadenas afiliadas una película por día. En otras palabras, la suscripción da derecho a una entrada de cine diaria.

Cada pago nos garantiza una treintena de funciones mensualmente.

Durante el tiempo que lleva funcionando ha tenido buena aceptación, pues el 91% de locales de cine en el país norteamericano (34 mil aproximadamente) se encuentran afiliadas a MoviePass. No obstante a esta cobertura, el precio representaba un obstáculo importante para un consumidor cada vez más asiduo a suscripciones de plataformas como Netflix, Hulu o Amazon Video. Asimismo dificultaba que el mismo pudiese expandirse a otros países.

Desde mediados del mes de agosto, el servicio ha sido objeto de una rebaja sustancial que en principio significa su despegue definitivo. Desde esta fecha, la suscripción a MoviePass tendrá un costo mensual de US$9.95, poniéndose así a la altura de las referidas plataformas. Pese a que en principio suena muy bien, es evidente que no puede tenerse todo.

La suscripción no incluye películas en 3D, IMAX u otros formatos especiales.

Tras el anuncio, posibles nuevos usuarios hicieron colapsar el sitio web de MoviePass debido al brusco incremento de la demanda por suscripciones a esta plataforma que fuera fundada por uno de los creadores de Netflix, Mitch Lowe. Sin embargo, como todo lo novedoso, siempre hay alguien que en un primer momento se opondrá.

Representantes de AMC, una de las cadenas de cine más importantes de los Estados Unidos, han declarado que no sostendrán acuerdo alguno con MoviePass para las funciones que se lleven a cabo en sus locales. De acuerdo a lo manifestado, esta rebaja en el precio es atentatoria contra los intereses del público en general y los diversos estudios de cine.

Más allá de las voces en contra, a todas luces MoviePass ha captado la atención del público y se anticipa una asistencia razonable a diversas funciones durante los próximos meses gracias a este servicio. ¿Y tú, te suscribirías a este u otros servicios parecidos? Te invitamos a compartir tu opinión.