Emmanuel Macron y la Europa perdida

Emmanuel Macron y la Europa perdida

Un gobierno diferente fue la principal apuesta del presidente francés, Emmanuel Macron, en sus días de candidato a la máxima magistratura del país galo. Más temprano que tarde, el presidente más joven de Europa ha empezado a tomar acciones concretas al respecto y al mismo tiempo, pretende restaurar la credibilidad de la Unión Europea desde su gestión al frente de Francia.

El pasado 3 de julio, Emmanuel Macron reunió en el Palacio de Versalles a ambas cámaras del Parlamento Francés con el objetivo de plantearles la visión que tiene para su mandato. Anunció una reforma institucional para su país. Los planteamientos reformistas del presidente tienen por objeto transformar la representatividad de la sociedad francesa en las instituciones de Estado, principalmente en el Parlamento. Si bien los anuncios hechos por Macron son atinentes a la situación política de Francia, responden la lógica de un problema más complejo.

“La Unión Europea ha perdido el rumbo”

Esta fue una de las frases más destacadas del discurso del lunes, pues encierra muy buena parte de la visión del presidente. Macron, junto con la canciller alemana, Angela Merkel, tienen como una de sus principales plataformas el rescate de la Unión Europea. Esta, a decir del presidente francés, ha tenido una década muy turbulenta en la que en el sistema del bloque europeo ha cundido la burocracia a niveles asombrosos.

Como resultado, un creciente escepticismo respecto de la Unión Europea es notable tanto en Francia como en el resto de países miembros del bloque. Al mismo tiempo, calificó la salida de Gran Bretaña del referido organismo como un espasmo que es un síntoma y un resultado lógico de la presente situación.

Emmanuel Macron y la Europa perdida

«En el pasado preferimos los procedimientos a los resultados, la reglamentación a la iniciativa, la sociedad de la renta a la sociedad de la Justicia», señaló Emmanuel Macron respecto de una Europa que ha privilegiado las excesivas leyes y procedimientos a los que deberían ser sus objetivos y resultados prácticos: Una Europa más libre, unida y justa. Al mismo tiempo, el presidente destacó que una nueva generación de líderes es necesaria para la reconstrucción de la Unión Europea.

Con este objetivo en mente, el presidente se ha propuesto reformar las instituciones.

Acto seguido a exponer la situación del bloque europeo, Macron dedicó el resto de su discurso al anuncio de fondo, que es la reforma institucional del Estado francés. Una primera acción en este tema es la reducción de un tercio de los miembros del Parlamento, la cual sería efectiva tanto para la Asamblea Nacional como para el Senado.

De acuerdo con el presidente, esta y otras acciones pretenden dar una mayor representatividad a los departamentos y regiones más importantes del país, al tiempo que es un primer esfuerzo por recomponer al Estado de una forma más eficiente y menos costosa. Asimismo, Macron se comprometió a una rendición de cuentas anual, cosa poco común en el gobierno francés.

Emmanuel Macron es ciertamente un político diferente, pues desde el primer momento se ha propuesto cambiar un sistema cuyos resultados únicamente se han expresado en el ámbito económico pero ha quedado a deber en cuanto a la situación social. Esto no sólo en Francia, sino en toda Europa. El éxito de su proyecto dependerá de su arriesgada pero nunca antes intentada apuesta, la cual consiste en cambiar los fundamentos del estado de raíz y desde adentro.