Estudio reciente comprueba certeza de adicción digital

Estudio reciente comprueba certeza de adicción digital

Si bien es cierto que el entorno digital nos pone prácticamente cualquier cosa que se nos ocurra a un click de distancia, es una sospecha innegable que la permanente conectividad puede generar adicción. A menudo podemos ver en casi todas partes a grupos enormes de personas con su Smartphone en la mano haciendo distintas cosas, pero en casi ningún caso verse de frente el uno al otro.

Puede que en un muy buen número de casos cada persona esté atendiendo sus propios asuntos y que el individuo más próximo sea un completo extraño, pero el solo hecho de casi nunca despegarse del teléfono móvil, Tablet u otro device es una circunstancia que merece toda la atención en cuanto a si se trata de un problema serio.

Todo en exceso es malo, inclusive la tecnología.

GFK, una empresa de investigación mercadológica con sede en Alemania, presentó hace poco tiempo los resultados de un estudio llevado a cabo en 17 países con objeto de comprobar hasta qué punto el mundo padece adicción a la tecnología. El informe de la investigación quizá no revela cifras alarmantes, pero si suficientes como para confirmar las sospechas que desde hace mucho se tienen sobre excesiva difusión de las TICs.

México, China, Brasil, Argentina y Estados Unidos son los países con mayor grado de uso excesivo de smart devices.

Este grupo de países aparece categorizado en el estudio como los casos más preocupantes, puesto que en cada uno, entre el 30% y 45% admite utilizar en demasía su teléfono inteligente u otro tipo de dispositivo. Paralelamente, se ha detectado también algo que probable que no sea sorpresa, pero definitivamente requiere atención, y es que en prácticamente todas las naciones participantes en el estudio. Cerca de la mitad de los jóvenes tiene problemas para desconectarse; incluso cuando las circunstancias lo demandan. En contraste, los usuarios mayores de 35 años son quiénes encuentran más sencillo tomar un descanso tecnológico.

Las causas de este fenómeno pueden estar asociadas al stress y al nivel de ingreso.

Resulta lógico que China y Estados Unidos aparezcan mencionados entre el grupo de casos importantes, puesto que ambos países tienen notables niveles de ingreso. Por ello, el acceso a tecnología resulta sencillo para casi cualquier individuo. Por otra parte y con la excepción de Samsung y LG, en estos países se asientan las principales desarrolladoras de teléfonos inteligentes y tecnologías asociadas (Apple, Huawei, Xiaomi, entre otros).

Llama la atención que el resto del grupo lo componen países de América Latina. De éstos, el caso mexicano resulta particularmente interesante. El informe de GFK encentra sustento en las cifras de Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (INEGI) de la nación azteca, ya que según esta institución, 3 de cada 4 mexicanos utilizan teléfonos inteligentes. De este mismo caso en particular se comenta que la causa de ello es el stress, pues México está catalogado como el país más estresado a nivel mundial. Ello es congruente con la hipótesis de que se publica continuamente en redes sociales en busca de bienestar y aprobación, ya que se afirma que los llamados likes y reacciones positivas causan segregación de dopamina. En busca de este placer artificial, es que existe una cierta ansiedad por la adquisición de tecnología.

Los resultados de esta investigación son dignos de acogerse no sólo en los países estudiados, sino en todo el globo terráqueo, dado que los patrones observados son susceptibles de repetirse en aquellos territorios cuyas características sean similares a los casos mencionados. Valga mencionar que el fenómeno de la adicción digital todavía está lejos de ser categorizado como irreversible.