Manos Amigas: La misión de cambiar vidas a través del trabajo

MANOS AMIGAS – LA MISIÓN DE CAMBIAR VIDAS A TRAVÉS DEL TRABAJO

Hay un proverbio chino que se ve reflejado en el trabajo de la Asociación Manos Amigas y este dice: “Regala un pescado a un hombre y le darás alimento para un día, enséñale a pescar y lo alimentarás para el resto de su vida”. Este es un proverbio con una lección de vida poderosa y esta filosofía se refleja en ducha asociación por varias razones.

Manos Amigas nace después de los terremotos del 2001. Sus primeros pasos fueron acciones nacidas de la voluntad y el espíritu de ayuda que también caracteriza a la sociedad salvadoreña.

Carmen Elena de Ruiz, Representante Legal de Asociación Manos Amigas, relata que después del segundo terremoto del 2001, en conjunto con unas amigas y sus hijas, se organizaron para ayudar. Se enfocaron en lugares donde no hubiera llegado ni fuera a llegar ayuda, pero algo que descubrieron en esos viajes es que muchas de las personas no estaban en condiciones difíciles de vivienda a causa del terremoto.

Vivían de esa forma desde mucho antes.

Desde entonces decidieron quedarse ayudando de forma permanente. De allí surge la idea de formar una figura de ONG y se legalizan como Asociación Manos Amigas. Ella relata: “Hicimos algo como una prueba piloto, buscamos un lugar donde nos pudiéramos establecer, que fuera sano y que hubiera mucha necesidad”. Se encontraron con Santa Lucia de Los Palones. “En aquel entonces eran 360 familias,” explica Carmen Elena de Ruiz, “además de repartir comida, hicimos una guardería improvisada para los niños mientras se trabajaba con los adultos. Les dije a 80 mujeres que íbamos a dar vivienda, salud y trabajo”.

De una reunión que tuvieron en el Arzobispado con Monseñor Saénz Lacalle, resultó el contacto con unos españoles que tenían la voluntad de apoyar a los salvadoreños en esta difícil situación. Se les presentó un proyecto de construcción de casas.

A esta fecha, se llevan 560 casas construidas.

Hasta ahora ellos siguen colaborando con la Asociación.

Carmen Elena nos comenta lo siguiente: “En el momento que existe una tragedia país, hay muchas personas dispuestas a colaborar. Sin embargo, ayudar se vuelve cuesta arriba cuando pasa la impresión de lo sucedido”.

Posteriormente iniciaron el proyecto con idea de la Negra Álvarez (Artista salvadoreña) de hacer un Taller de productos artesanales. Ella les presentó a su sobrina Lourdes Vides de Castillo, quien se convertiría en la diseñadora de la línea de productos. En su momento se encargó de diseñar, costear y de poner precios a los productos.

MANOS AMIGAS – LA MISIÓN DE CAMBIAR VIDAS A TRAVÉS DEL TRABAJO

Se inició el taller en Santa Lucía de Los Palones y en el 2002 se mueve el taller a San Luis Talpa, donde se encuentra actualmente un terreno que les dio en comodato la Alcaldía del lugar. Este taller se trata de generar un proyecto integral, donde en primer lugar se ven beneficiadas 26 familias en las cuáles al menos un miembro de ellos trabaja en el Taller de artesanías. También con lo recolectado se apoya a la comunidad con alimentación.

Esta ayuda es principalmente para los niños, la guardería y la clínica comunal.

Todo esto se ha logrado también identificando e integrando líderes comunitarios positivos en el proyecto. Uno de ellos fue Pedro Israel Martínez y Rosa del Carmen.

La Clínica Miraflores empezó con la ayuda de un médico ad honorem. Fue un impacto muy grande debido a la cantidad de casos que van más allá de enfermedades comunes. En estas zonas, es común ver casos de abusos, que indudablemente tocan el corazón. El mantenimiento de la clínica se lleva gracias a donaciones de algunos laboratorios con medicinas, y otras colaboraciones.

Inicialmente se comenzaron vendiendo las artesanías a través de diferentes asociaciones y comercios como: ASI, Torogoz, Nahanché; y con el apoyo de patrocinadores como:

 Aeroman, Cosocial, Laboratorios Vijosa, RIGME y Fundación Sigma.

En estos momentos se enfrentan a un posible cierre de la tienda de Manos Amigas en el Aeropuerto, por los trabajos de remodelación. Aparentemente, estos hacen imposible la reubicación de la tienda, cerrando así la fuente de ingresos más estable de la asociación, que implicaría el cese de varias plazas.

Existe un abanico de historias detrás de todo el trabajo que ha realizado Manos Amigas en estos diecisiete años. Se han tenido altos y bajos; los bajos van enmarcados en la falta de recursos para seguir adelante la operación del taller y los diferentes programas que se llevan a cabo.

Si tú estás en disposición de apoyar este programa y mostrar tu solidaridad a la causa, puedes ponerte en contacto con ellos al teléfono (503) 2223-8692,o vistarlos en su sitio web oficial o su página de Facebook.