Algunos dirían que incluso sufrieron un ataque al corazón con el último capítulo de la séptima temporada de Juego de Tronos (Game of Thrones). Realmente, cuesta elegir a qué sentimiento aferrarse tras haber visto una amalgama tan fascinante y caótica de escenas.
Comenzando por lo primordial, la reunión entre Jon Snow, Daenerys Targaryen y la despiadada Cersei Lannister por fin tuvo lugar. A muchos nos estaba matando la curiosidad de ver el rostro de Cersei cuando conociera a la madre de dragones por primera vez, quien por cierto, hizo una entrada espectacular montando a Drogon. En todo caso, en dicha reunión se logró el propósito principal:
Mostrarle a Cersei uno de los temibles Caminantes Blancos.
Yéndonos más allá de la naturaleza política y estratégica de estas escenas, la conversación semi privada entre Tyrion y su malvada hermana (No podía ser totalmente privada por la presencia de La Montaña) nos dio a entender una cosa: La Reina no entiende razones. Y sí finge hacerlo, es sólo porque le conviene. Pero la verdad es que Cersei está cegada por una furia y un resentimiento sin bases fuertes ante Tyrion, y descaradamente admitió lo siguiente: No le interesa hacer del mundo uno mejor.
Cersei le admite a Jaime que la tregua, por su parte, fue falsa ya que piensa traicionar Jon y a la Madre de Dragones, ya que sólo le importa proteger a su futuro hijo (Si es que llega a tenerlo).
Por otro lado, los fans aplaudieron de gozo ante el desarrollo de la trama que giraba en torno a la pelea entre las dos hermanas Stark. Ya muchas teorías circulaban el internet, asegurando que no era posible que Arya fue tan mala espía que se dejara ver por Lord Baelish, ni Sansa podía seguir siendo tan ingenua de creerse las palabras manipulativas de este hombre tan engañoso.
Gracias a las visiones de Bran Stark, los hermanos Stark logran revelar la traición que Littlefinger cometió contra su padre, Ned Stark, en la primera temporada.
Las teorías resultaron ser ciertas.
Y Sansa y Arya se ganaron el respeto de la audiencia en este episodio.
Littlefinger, al igual que el miserable personaje de Lord Frey, tuvieron la muerte que merecían, y los dos a manos de la valiente Arya. Eso le pasa por subestimar a las hijas de Ned Stark.
Sansa y Arya están más unidas que nunca.
Sin embargo, el espíritu dramático de la serie no se queda en estos fragmentos de la historia que, sin lugar a dudas, llenaron de gozo a los fans.
No se puede dejar de lado el hecho que el dragón que murió el episodio pasado ahora forma parte del ejército de los muertos. Y sí que el Rey de la Noche se ha salido con las suyas para ganarse una pieza poderosa. Viserion ahora es toda un arma letal, lanzando, en lugar del fuego, lo que parecía ser una extraña combinación entre dicho elemento y hielo (Esto aún está por confirmarse).
Sin lugar a dudas, no queremos imaginar lo que sentirá Daenerys al ver a Viserion de esta manera.
Ahora el Rey de la Noche es quién tiene el poder sobre al dragón. Cuando Daenerys se entere, ¿cómo crees que va a reaccionar?
Dejando de lado esta desgarradora situación, aún falta hablar de la cereza del pastel de este enredado mundo ficticio. El Hielo y el Fuego se juntaron se una vez por todas cuando Daenerys y Jon dieron el siguiente paso en su atracción mutua.
Para muchos, el punto de toda esta fantástica saga era que estos dos personajes protagónicos llegaran a este encuentro romántico. Y en muchas formas, la propia temporada fue criticada por parecer una especia de fanservice al adquirir esta tono tan Hollywoodiense al darle a los fans algo que parecía ser tan obvio.
El momento en que Jon anunció frente a Cersei Lanniste, que sólo servía a una reina, y que esta era Daenerys, los fans de esta pareja enloquecieron….y la misma Daenerys se sonrojó.
Sin embargo, una vez que el Hielo y el Fuego se juntó, al mismo tiempo una bomba explotó; una bomba que ya varios seguidores habían notado y esperado. Bran Stark y Sam descubren juntos el secreto de Jon Snow:
Él es el heredero al trono.
Rhaegar Targaryen y Lyanna Stark se casaron, por lo que Jon Snow no es ningún bastardo, sino un legítimo Targaryen.
Cuando se entere, habrá deseado que le hubieran informado de este «pequeño detalle» mucho antes de dejarse llevar por la atracción que sentía hacia Daenerys, quien es en realidad su tía.
Y ahora no toca más que esperar a la siguiente temporada. ¿Qué otras bombas habrán de explotar en los nuevos episodios? ¿Este final te dejó feliz o confundido? ¿Y te dejó aún más obsesionado con Juego de Tronos?
